Aunque todavía hace calor, la verdad es que ya todo apunta al otoño. Y nada mejor para animarse un poco que un buen café con un par de buñuelos....
Estos buñuelos los hago desde que mi vecina Elisa me los enseñó. Me costó lo mío, pero al final aprendí, y ya no cambio la receta. Son fáciles de hacer, rápidos y suelen gustar hasta los que están acostumbrados a la masa con levadura prensada,( buñuelos de toda la vida ).
Ah!. Algo importante. Yo , que soy fan incondicional de Thermomix, he adaptado la receta al Robot; pero no tiene más que mezclar el agua templada con sal, con la harina, y echar al final el sobre de " gaseosilla".
Probadlos, y ya me contaréis!!
INGREDIENTES:
450 Gramos de agua.
400 Gramos de harina floja
Un sobre de " gaseosa ",( El tigre, Hacendado..)
Un sobre de " gaseosa ",( El tigre, Hacendado..)
8 gramos de sal.
ELABORACIÓN:
Cernemos la harina con el contenido del sobre de gaseosilla y la sal. Reservamos
ELABORACIÓN:
Cernemos la harina con el contenido del sobre de gaseosilla y la sal. Reservamos
Echamos el agua y la sal. Programamos 2 ó 3 minutos 37º, V 1. En realidad es lo que tarde en quedarse la luz fija.
Echamos toda la harina y programamos unos cuantos segundos en Velocidad 6. Lo justo para que se mezclen el agua y la harina, y quede sin grumos.
Echamos toda la harina y programamos unos cuantos segundos en Velocidad 6. Lo justo para que se mezclen el agua y la harina, y quede sin grumos.
Pues todo a una jarra y dejamos en reposo mientras se calienta el aceite. Si hace calor, mejor llevamos a la nevera. Si está la masa fresquita, cuando entre en el aceite al freir, no se nos romperá, afeando nuestro buñuelo.
Lo de la jarra es que así nos evitamos echar la masa a cucharadas sobre la buñolera. Se mancha menos.
El aceite en una sartén honda con la buñolera dentro que se vaya calentando. No os preocupéis por el aceite, no se mancha y se puede utilizar para freir patatas, o guisar.
Pues una vez humeante, vamos llenando la buñolera y metiendo en el aceite. El buñuelo saltará y flotará en él. Damos la vuelta y freímos por la otra cara.
En fin, que es más complicado explicarlo que hacerlo...
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