Se trataba de un Curso de pan con masa madre. Me he traído experiencias y teorías que a partir de ahora pondré en práctica.
Andrés, de El Amasadero, es el que impartía el Curso. Se le veía ilusionado con su trabajo, experimentado, y, sobre todo muy paciente
Los resultados, aquí los veis. ¡Magníficos!. Buenas combinaciones de harinas diferentes, que han creado masas aromáticas, y llenas de sabor. Y es que esto de la masa madre es otro mundo...Pero.....,( siempre hay un pero), no es fácil dar con ella. Primero hay que crearla, ( en el Curso nos regalaron un poquito de una que tenía 5 años, y creamos una para llevar a casa ), y después dar con el grado de acidez que vaya bien a nuestro paladar. Pero ahora entiendo lo que leía de Ibán Yarza, cuando hablaba de sabor a cereal, a frutos secos... ¡ Sabor a pan!.
De todos los panes, el que más me gusta es el más tostadito. Nos fuimos , y Andrés lo dejó con el horno apagado, y como tenía piedra de hornear, siguió cociendo. Precisamente es el que he fotografiado el corte, ( ¿ veis las pipas ?). Se que es cuestión de gustos, pero creo que un pan bien cocido gana mucho en sabor.
En el Curso, no es lugar para decir que tu pan sigue más tiempo..., allí aprendemos y en casa aplicamos a nuestro gusto.
Merece la pena " meternos en harina ". Es muy gratificante. Además de un constante reto.